En estos días en que el sistema universitario argentino está siendo atacado por el gobierno nacional a través de un fuerte recorte presupuestario y de declaraciones del propio presidente Milei en las que aseguró que las universidades se usan “para hacer negocios turbios y adoctrinar”, repasamos cómo fue el recorrido del sistema público universitario en nuestro país, de la mano del Profesor de Historia, Gabriel Rafart.
En diálogo con Fabián Polizzo, en Todo el mundo sabe, Rafart se remontó a los orígenes de la gratuidad en el sistema universitario argentino, en 1949, durante el peronismo.
“El fin del arancelamiento del sistema universitario marcó un salto cuantitativo y en cierta medida cualitativo respecto a la polémica que significó romper con un sistema aristocratizante, por demás al servicio de profesiones liberales”, indicó.
Sostuvo que cuando Perón llega a la presidencia en febrero de 1946 el sistema universitario público argentino, que contaba con media docena de universidades, “no sumaban más de 40 mil alumnos en su totalidad” y “su despliegue territorial estaba por demás limitado”.
Cuando se establece la gratuidad del sistema universitario, a través de la ley 29.337, de fines de 1949, “empieza un proceso de crecimiento de la matrícula que hacia 1955, cuando Perón es desalojado del poder, ya la cifra del sistema está rondando los 140 mil alumnos”. Es decir, “un crecimiento del orden del 350 por ciento”, detalló.
Para 1973, cuando Perón vuelve al poder, el número de alumnos de las universidades, que ya eran el doble de las que había inicialmente, rondaba las 400 mil. “La población se ha duplicado respecto del primer peronismo”, señaló.
“esto que estamos viviendo hoy los profesores universitarios, los alumnos, los graduados del sistema público universitario argentino, en cierta medida, se parece bastante a esos intentos de avanzar hacia una política restrictiva como fue los años de la última dictadura militar”
Basándose en esos datos para pensar la situación actual del sistema universitario nacional, sostuvo que “esto que estamos viviendo hoy los profesores universitarios, los alumnos, los graduados del sistema público universitario argentino, en cierta medida, se parece bastante a esos intentos de avanzar hacia una política restrictiva como fue los años de la última dictadura militar”.
“En términos cuantitativos la expansión del sistema había llegado a contar con unos 450 mil estudiantes hacia 1976. Cuando los militares se están retirando, para 1983, el sistema cuenta con 400 mil estudiantes. O sea, se redujo algo más del 10 por ciento la cantidad de alumnos porque en parte se había arancelado, se había establecido el ingreso restrictivo con examen y con cupo”.
“Más adelante vemos esta esta expansión donde hoy Argentina tiene uno de los sistemas públicos y también privados de los más importantes de la región, amén de varias universidades que están en el top de las primeras cien y otras tantas entre las primeras quinientas del mundo universitario a nivel mundial”.
Rafart se refirió también a “las paradojas de la historia” porque así como el peronismo instauró la gratuidad en el sistema universitario “sabemos que el peronismo trató de tener un control bastante fuerte y diríamos en su punto realmente doctrinario respecto a lo que hoy se está diciendo. Porque el sistema plural que nosotros hoy vemos en la universidad, lo que se enseña, quiénes están, lo que se aprende, está muy lejos… es muy difícil adoctrinar”.
Consultado acerca de si ampliar el acceso a la universidad fue una medida populista, Rafart explicó que “la mayor parte del mundo universitario fue opositor a Perón”.
Escuchá un fragmento de la entrevista:
Gabriel Rafart es Profesor de Historia, Docente en la Universidad Nacional del Comahue y en la Universidad Nacional de Río Negro. Integra el Grupo de Estudios de Historia Social y el Instituto Patagónico de Estudios de Humanidades y Ciencias Sociales (Conicet).