“Las Revueltas armaron un dispositivo que pudieron transmitir a cada una de las agrupaciones que hay en las provincias del país para que todas hicieran lo mismo y fuera un dispositivo seguro y efectivo. Es un ejemplo único en el mundo”, aseguró Gabriela Luchetti, médica ginecóloga, docente investigadora de la UNCo y autora, junto a Valeria Albardonedo y María Victoria Alfonso, del trabajo “Socorristas en red: Soporte comunitario a la autogestión del aborto en Argentina”, que se presentó el lunes por la tarde en el auditorio de la Facultad de Economía. Además de estudiantes, docentes y público en general, estuvo presente la rectora de la casa de estudios, Beatriz Gentile, y la médica y ex legisladora de Río Negro Marta Milesi.
El dispositivo al que hace referencia y que fue objeto de estudio es “Socorristas en Red”, una articulación de colectivas de Argentina que desde 2012 acompañan a mujeres y personas gestantes a interrumpir embarazos siguiendo los protocolos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El origen estuvo en Neuquén cuando La Revuelta comenzó con el “Socorro Rosa”, una línea telefónica que brindaba información sobre abortos con medicamentos. Este activismo también tuvo su genealogía en otras que vinieron antes, como “Las Jane” de Estados Unidos.
En diálogo con Intempestiva, Luchetti explicó que lo presentado es parte de una investigación más grande que se titula “Soporte comunitario a la autogestión del aborto, métodos impacto sanitario y económico e interacciones con el sistema de salud”, y que cuenta con un análisis sobre el impacto presupuestario del socorrismo en el sistema de salud y con 300 entrevistas a profesionales de la salud de todo el país sobre las socorristas. Los resultados serán publicados próximamente en un libro. Participaron dos médicas ginecólogas, un médico terapista, tres médicos clínicos, una economista y dos comunicadoras sociales.
La divulgación de este trabajo se da en un contexto de un brutal desfinanciamiento por parte del gobierno de Javier Milei a todo lo vinculado con la generación de conocimiento. Esta investigación fue realizada en el marco de una convocatoria de la dirección de Salud Investiga, del Ministerio de Salud de la Nación, organismo que apunta a investigar desde lo asistencial. “Hace una semana dieron de baja las becas Salud Investiga, no hay más financiamiento, las becas ya otorgadas para este año no las pagaron. Quedan solamente las Universidades y el Conicet, como los únicos lugares en donde hay financiamiento para la investigación; en este caso es muy importante porque se hace desde lo asistencial. Las preguntas te las hacés desde la sala de internación, son las cosas que te llaman la atención”, explicó Luchetti.
En cuanto al estudio publicado, la docente explicó que ”era tiempo ya de ver esta maravillosa actividad comunitaria como es el socorrismo” y agregó que ”hoy presentamos una parte, que es la que fue publicada en la revista de la Universidad de Lanús “Salud Colectiva”, pero no queríamos que quede sólo para la academia, por eso también la presentamos hoy ante la comunidad”. Las investigadoras recorren los inicios de la colectiva feminista La Revuelta en el acompañamiento de abortos, cómo fue el proceso de generar un dispositivo que no sólo brinde información, sino que registre los acompañamientos y que genere vinculaciones con profesionales de los sistemas de salud. Entrevistaron a tres integrantes de La Revuelta y a 33 de las grupas socorristas, entre noviembre de 2019 y diciembre de 2020.
El trabajo coincide y suma conocimiento a distintas producciones que a nivel internacional reconocen la importancia de las organizaciones comunitarias en la garantía de abortos autogestionados. Recientemente la revista médica británica Lancet publicó un artículo que destaca la efectividad y seguridad del dispositivo socorrista.
Durante la presentación, la socióloga Julia Burton remarcó distintos aspectos que hacen relevante esta investigación: su punto de vista no metropolitano y federal al entrevistar a socorristas de todo el país, la publicación de un estudio socio sanitario y médico sobe aborto en castellano porque la mayoría están escritos en inglés, la conceptualización del aborto seguro no solamente como práctica médica sino como una acción política de salud colectiva, y finalmente, el registro de los afectos y sentimientos que atraviesan las socorristas durante los acompañamientos.
En el cierre, Ruth Zurbriggen -docente y fundadora de La Revuelta- sostuvo que desde el socorrismo “no competimos con el sistema de salud, buscamos facilitar el acceso”, aunque reconoció que aún después de la Ley IVE (27.601) muchas personas siguen eligiendo abortar acompañadas por las socorristas y no asistir al hospital o a una clínica. En cuanto al complejo momento actual, de políticas crueles y retroceso de derechos, indicó que si bien la ley que garantiza las interrupciones voluntarias de embarazos sigue vigente “se deroga en los hechos cuando no hay insumos”, en referencia a la falta de envío de medicamentos para abortar -entre otros vinculados a la salud sexual, reproductiva y no reproductiva- por parte del Gobierno nacional. “Ante esto sostenemos la Red y seguimos activando para construir otros contextos y otras esperanzas”, alentó.