En Neuquén capital existen cuatro salas de teatro independiente: Deriva, Te.Ne.As, Ámbito Histrión y El Arrimadero. Cada una aloja diferentes obras y actividades escénicas y artísticas. Desde hace muchos años vienen abonando la cultura neuquina y resistiendo a los cambios socio económicos.
Deriva, la sala más nueva de la ciudad. Se encuentra en Sarmiento 800 y cuenta con un espacio versátil, que permite organizar y delimitarse según la puesta. Verónica Martínez Durán, actriz, directora y referente de Deriva Teatro, aseguró que el alquiler de la sala se incrementó mucho y eso se suma a la suba de los servicios. “No podemos aumentar las entradas, lo que deberíamos, porque los sueldos no aumentan, así que las subas son graduales”. Aclaró que si bien reciben un subsidio anual del Instituto Nacional del Teatro (INTI), el mayor caudal de dinero entra por la boletería. “En este momento, igual que todas las salas independientes de teatro, recibimos un subsidio anual que es del Instituto Nacional del Teatro. Las salas que pagamos alquiler lo guardamos para el momento de muy baja temporada, que serían enero y febrero. A veces no nos alcanza para los dos meses tampoco”, dijo y remarcó que además “hay una ordenanza por la cual la Municipalidad de Neuquén haría aportes a las salas de teatro, pero no se cumple y adeudan”.
“Hoy por hoy nos esforzamos mucho más para traer público y mantener las actividades”, agregó e indicó que “como nuestro equipo trabaja para sostener el espacio tomando turnos y lo hace sin percibir sueldos, todavía podemos sostenernos”. Verónica también es programadora en la sala y contó que trabaja en conjunto con Sebastián Fanello, director y dramaturgo, y un equipo de actores y actrices como Verónica Cardoso, Soledad Vargas, Gastón Fernández, Manu Maritano, Juampi Ríos y Rocío Nueve Pumas, entre otros, quienes realizan un montón de tareas más además de actuar y dirigir.
Uno de los teatros más añosos de Neuquén es Ámbito Histrión, lugar que supo abrir sus puertas para la Escuela Experimental de Danza Contemporánea, a los clásicos “Domingo de Terciopelo”, de ArtePidol, y que supo adaptarse en los diferentes contextos económicos. Está ubicado en Chubut 240, tiene una capacidad aproximada para 150 personas y cuenta con un bar, que también ha recibido a músicos y músicas regionales. Durante la pandemia, el teatro fue uno de los rubros más golpeados, por eso Histrión motorizó muchas tareas para la reactivación de la actividad, como por ejemplo “Volver al Arte”, un ciclo de espectáculos de teatro, clown, circo, danza y música al aire libre.
El Arrimadero funciona desde hace 15 años en Misiones 234, allí donde tuvo lugar mucho tiempo antes el Viejo Teatro del Bajo. Flavio González, encargado del teatro, contó que el ajuste económico “está impactando bastante fuerte en la sala por los costos elevados, tanto de los servicios como del alquiler, más allá de los resultados de cómo están funcionando los espectáculos porque, sinceramente, están funcionando muy bien. La sala se llena, pero así y todo no está alcanzando a cubrir los costos”.
En diálogo con Intempestiva, enfatizó en que llegan a “hacer malabares para poder pagar todo” porque “no recibimos ningún subsidio, salvo un aporte municipal que no alcanza ni para pagar una factura de gas”. “Es una vergüenza el importe”, afirmó. Sin embargo, comentó que no dejan de sorprenderse por la fidelidad del público que habitualmente agota las 90 localidades disponibles. “El Arrimadero se sostiene gracias al aporte de quienes toman talleres, que son alumnos de hace muchos años, de las entradas y una pata importante de los ingresos es el buffet”, sostuvo.
A diferencia de los otros tres, que están en el centro de la ciudad, Teatristas Neuquinos Asociados (Te.Ne.As), desde hace diez años funciona en Leguizamón al 800, en un espacio más natural, a pocas cuadras del río Limay. Tiene una boletería de adobe y un jardín, antes de ingresar a la sala Las Alicias (llamada así por tres de las desaparecidas de Neuquén que eran teatristas: Alicia Pifarre, Alicia Figueira de Murphy y Alicia Villaverde). Laura Mondino, protesorera de la comisión directiva de la asociación, se atrevió a decir a Intempestiva que “es la sala de teatro más grande y mejor equipada de Neuquén”, ya que cuenta con “270 sillas que hacen las veces de butacas”.
Relató que el contexto de ajuste económico les impactó “profundamente”, ya que esta asociación se sostiene con el aporte de las cuotas sociales para la gestión de encuentros de teatro, de eventos, para el mismo mantenimiento de la sala y el pago de impuestos. “Hasta el año pasado contábamos con subsidios a nivel nacional a través del Instituto Nacional del Teatro, que este año se han reducido considerablemente”, indicó. Explicó que a nivel provincial no perciben “ninguna ayuda por parte del Estado” y aclaró que “sí estamos recibiendo un aporte desde el municipio, pero que lamentablemente se vuelve muy bajo en comparación a lo que han subido los impuestos”.
En consecuencia, Mondino sumó que “nuestra grupalidad se ha declarado en emergencia económica, en emergencia organizativa, porque también ha disminuido la cantidad de público que va al teatro”. Es decir, el quehacer teatral deja de ser rentable para quienes trabajan allí, por lo que ahora están “trabajando grupalmente en nuevas maneras de administrar, de promocionar, de convocar a la gente para ver si salimos adelante de esta crisis que afecta a todos. Lamentablemente, la cultura y el arte son los rubros que más abandonados quedan y que más la sufren”.
Talleres, seminarios y otras actividades
En cada espacio, además de las ya mencionadas actividades se realizan otras relacionadas con el teatro y el arte. En Deriva, no sólo hay funciones todos los fines de semana, algunas veces se programa música o algún evento artístico en particular. También hay talleres de actuación, de improvisación, de teatro para adolescentes, un taller de tallado en goma espuma y otros seminarios cortos que se suman. Allí también se reúne la colectiva de arte y salud mental “La ventana”, y cada tanto se proyectan películas acompañadas de debates sobre temas de derechos humanos o salud mental.
Verónica Martínez Durán resaltó que este año se realizó un ciclo de espectáculos para las infancias, además del proyecto Viento en Popa, que consta de encuentros únicos. También recordó que “hacíamos el festival de Mujeres a las tablas” y aclaró que se realizaron 9 ediciones, pero se dejó de hacer hace tiempo porque “se necesita mucho apoyo para llevar adelante un festival de esas características”.
El Arrimadero ofrece alrededor de 13 talleres, de lunes a sábado: teatro, danza teatro, percusión, canto y máscaras, entre otras actividades esporádicas. Por su parte, Ámbito Histrión brinda clases de teatro, danza, entre otras, además de las funciones y talleres intensivos.
Regularmente, en el espacio de Te.Ne.As. se realizan talleres. En la primera parte del año, hubo un taller de teatro para infancias, dos talleres de teatro para adultos y, para agosto, se esperan nuevas propuestas. Laura Mondino resaltó el que brindó el docente y dramaturgo Pompeyo Audivert, que fue llevado adelante con muy buena participación de la gente. “Para nosotros fue un honor recibir al maestro en nuestro espacio para compartir sus saberes”, dijo.
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Vacaciones de invierno
Los teatros neuquinos se convierten en una opción para las vacaciones de invierno, ya que tienen una grilla abultada de espectáculos para toda la familia.
Ámbito Histrión presenta una programación variada:
“Bajo Terapia”, jueves 11 de julio – 21:30 hs.
“El Quinto Evangelio”, viernes 12 de julio – 21:30 hs
“Los musis de profica”, sábado 13 de julio – 15:00 hs.
“Pudor en animales de invierno”, sábado 13 de julio – 21:30 hs.
“Así de simple”, domingo 14 de julio – 19:00 hs.
En Deriva está la editorial Saverio, que tiene textos teatrales. Y la grilla, que comenzó el 6 de julio, con Sueños de Pastel, y continúa hasta fin de mes con:
“Encender la Noche”, jueves 11, viernes 12, sábado 13 y domingo 14, dos funciones a las 16 y 17.30 hs. (teatro, sombras y títeres)
“Lila y Limón”, lunes 15 de julio, a las 16 y 17.30 hs. y domingo 28 a las 16 hs. (títeres)
“Improdecibles”, martes 16, 16 y 17.30 hs. ( teatro de improvisación)
“Sueño de Monigote”, miércoles 17, jueves 18 y sábado 20, dos funciones a las 16 y 17.30 hs. ( teatro negro)
Maravillas en el paíZ de las Halisias”, domingo 21, 16 hs. (teatro)
En El Arrimadero, además, se puede comer antes y durante los espectáculos. El ciclo de vacaciones de invierno comienza el 11 de julio y se extiende hasta el 28, con funciones a las 16 horas y entradas que no superan los $7000.
“Circo Viatrix”, Jueves 11
“Una historia de amor en Pehuajó”, del viernes 12 al domingo 14
“Maravillas en el paíZ de las Halisias”, Jueves 18
“Títeres y canciones”, Viernes 19
“Pichikeche”, Sábado 20 y domingo 21
“Cerdiña”, Domingo 28
Para estas vacaciones en Teatristas Neuquinos Asociados hay funciones todos los días. Empezaron el sábado 6 y terminarán el sábado 20. Se trata de espectáculos de circo, música, teatro, títeres y magia pensado para las familias y para las infancias.
“El desafío de la trucha dorada”, por Los Entretenedores. Miércoles 10 a las 17 hs.
“Varieté manke”, jueves 11, a las 17 hs.
“Pequeñas historias titiritescas”, viernes 12 a las 17 hs.
“Cortitas de luz”, sábado 13 a las 17 hs.
“Circo chicano”, domingo 14 a las 17 hs.
“El vendedor de globos, el presentador y la fleur”, lunes 15 a las 17 hs.
“Sueños de pastel”, martes 16 a las 17 hs.
“En blanco y negro a todo color”, miércoles 17 a las 17 hs.
“Robin Hood”, jueves 18 a las 17 hs.
“Ridículamente desencontrados”, viernes 19 a las 17 hs.
“Los musis de prófica”, sábado 20 a las 17 hs.
“Cirqueando en familia”, domingo 21 a las 17 hs.
