SOCIEDAD

Con equipos reducidos y recargados, la línea 148 resiste

La línea 148 resiste. Se creó en 2016 con la finalidad de que mujeres víctimas de violencia de género tengan un número donde pedir asistencia. Según sus propias estadísticas en estos 7 años atendió más de 20.000 situaciones en toda la provincia. Este año registraron 40 intervenciones de riesgo de femicidio.

El cimbronazo del nuevo gobierno de Rolando Figueroa y la reorganización de estructuras ministeriales dejaron al “Programa Provincial de Contención y Acompañamiento en las Violencias” con un personal reducido y recargado. El esfuerzo y compromiso de las operadoras mantiene en funcionamiento la línea de atención permanente.

Somos muy pocas para sostener el dispositivo que funciona las 24 horas y en toda la provincia. Hay compañeras en los territorios, en San Martín, Junín de los Andes y Chos Malal. Estamos a la espera que se firmen nuevos contratos”, aseguró Johana Berón, operadora de la línea desde octubre de 2018. La información de los ingresos fue confirmada por la secretaria de Emergencias y Gestión del Riesgos, Luciana Ortiz Luna. “Son 21 trabajadores que se entrevistaron y tienen todo hecho para ingresar”, afirmó la funcionaria y aseguró que las incorporaciones están previstas para julio.

Esto resolvería en parte la falta de personal que se viene alertando desde el inicio de la nueva gestión, en la que por el cambio de organigramas el dispositivo pasó a tener una “estructura interministerial”: Ministerio de Ciudadanía y Ministerio de Trabajo, Desarrollo Social y Seguridad. El cese de contratos y el pase de trabajadoras a otros sectores, implicó que la línea 148 tenga un plantel mínimo, a tal punto que en ocasiones hay solo una operadora por turno para atender las llamadas, sobre todo en los días hábiles. Desde el sector remarcaron que “estamos sosteniendo el dispositivo con mucho esfuerzo. Se hizo una re estructuración de todo, hay gente ya entrevistada hace meses para ingresar, nos explican que ingresarían con esta nueva estructura, la misma situación es para el Dispositivo de Atención a Varones”.

Existe la posibilidad que dentro de esta nueva organización la línea 148 pase a la órbita del ministerio de Seguridad. Sin embargo, Ortiz Luna indicó que “es un proyecto, aún no hay definiciones, hay muchas aristas a evaluar”, y que en caso que suceda el traspaso sería de toda la secretaría “para que tenga aún mayor posibilidad de acción”. De todos modos, afirmó que “las incorporaciones tienen que ver con la nueva estructura de la secretaría, no depende de donde quedemos”.

Los ingresos están prometidos desde marzo, luego de que incluso las trabajadoras iniciaran medidas de fuerza denunciando el vaciamiento del sector. No es la primera vez, en 2020 también el equipo de operadoras denunció un intento de reducir y desarticular el dispositivo que en ese momento contaba con 40 trabajadoras.

El contexto nacional de ofensiva contra las políticas de género sin duda impacta en el hacer cotidiano y los coletazos se sienten en la reducción de programas, en el cierre de espacios que previenen la violencia machista y también en la perspectiva de cómo abordar esta problemática que tiene como punto más visible un femicidio cada 40 horas en el país. Desde que asumió la presidencia Javier Milei cerró el ministerio de las Mujeres y Diversidades, disolvió la subsecretaría contra la Violencia de Género, desfinanció programas de acompañamiento, a la vez que tomó medidas de fuerte impacto simbólico como el cambio de nombre del Salón de las Mujeres en la Casa Rosada el 8 de marzo y la eliminación del lenguaje inclusivo en la administración pública.

En este sentido, Berón remarcó que “el desmantelamiento de las políticas nacionales que están vaciando las intervenciones en lo que respecta a violencias machistas nos afecta directamente. En la provincia se han desmantelado dispositivos, personas han sido cambiadas de lugares, hay algunos dispositivos que dejaron de funcionar, todavía otros no se terminan de acomodar. En ese primer llamado donde nosotras tenemos que brindar recursos (pasar números de teléfono, de contactos de instituciones) no sabemos quién está a cargo, si funciona o no el dispositivo”. La operadora agregó que a esto se suma la feminización de la precarización ya que se han dado de baja programas fundamentales como el que otorga un aporte de alquiler para víctimas de violencia de género.

Es importante tener la cantidad de personal que corresponde porque somos las mismas las que ponemos el cuerpo, si alguna se enferma vamos a cubrir el turno, y eso repercute en el cansancio cotidiano, en no poder tomarnos vacaciones o licencias”, sostuvo Berón.

La necesidad que plantean las operadoras se refuerza con las propias estadísticas de la línea que registraron 40 situaciones de riesgo de femicidio entre el 10 de diciembre de 2023 y el 10 de mayo de 2024.

Neuquén se ubica entre las provincias con la tasa más alta de femicidios (2,9%) -datos del Observatorio Mumala de 2023-. En lo que va del año, se registró un femicidio en la provincia, el de Cynthia Lagos en Junín de los Andes.

“Ya sabemos que Neuquén tiene la tasa de femicidios más alta del país, en relación con el número de habitantes. Las omisiones estatales y los recortes presupuestarios producen muertes y profundizan las violencias de género”, cuestionó Angie Acosta, abogada feminista e integrante del espacio de acompañamiento legal y acompañamiento Socorro Violeta, que funciona desde 2009 impulsado por la colectiva feminista La Revuelta.

Respecto a la línea 148, a principio de año denunciamos su vaciamiento. El dispositivo provincial, creado por ley, sufrió fuertes recortes incluso antes que el gobierno nacional realizara idéntico proceder con la línea nacional 144. La sobrecarga de trabajo para quienes atienden la línea nos preocupa y asusta. Sobre todo, porque de “normalizarse” esa situación se estaría maltratando a quienes atienden, además de repercutir en quienes acuden a la línea en búsqueda de ayuda. Menos personas para atender es sobrecarga laboral e implica un menor seguimiento a quienes piden ayuda para denunciar, para solicitar refugio u otro acompañamiento”, agregó Acosta.

En lo concreto remarcó que “antes podíamos decirle a las mujeres víctimas de violencia “acércate a la salita de tu Barrio para sacar turno con psicólogo/a”. Ahora eso parece una utopía, no hay turnos, no hay dispositivos de acompañamiento. ¿Cómo podemos “derivar” o  aconsejar a las mujeres a concurrir a programas inexistentes? Es una encerrona y una burla para las mujeres víctimas de violencia”.

Desde Mumala también aseguraron que el vaciamiento está afectando los acompañamientos a mujeres víctimas de violencias y a las familias. Ailín Aroca, referente de la organización aseveró que “es algo que se venía viendo desde antes pero ahora se ve mucho más por ejemplo en el ingreso a programas de asistencia como el Acompañar, se va a ir notando cada vez más cuando una mujer necesite asistencia económica, acompañamiento psicológico. La línea 148 trabaja interdisciplinariamente, con sus equipos y con la justicia, su vaciamiento afecta mucho porque las mujeres quedamos al descubierto”.

Si sufrís algún tipo de violencia de género podes comunicarte vía llamada al 148.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

X