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INTERÉS GENERAL

Condenaron a 4 responsables de la desaparición y el asesinato de Otoño Uriarte

Después de 18 años, hay cuatro detenidos por la desaparición y el femicidio de Otoño Uriarte. Desde ayer, Néstor Cau, José Jafri, Maximiliano Lagos y Germán Antilaf cumplen prisión preventiva luego de que el Tribunal de Cipolletti los declarara culpables por el delito de privación ilegítima de la libertad agravada de la adolescente de 16 años en Fernández Oro, Río Negro. La jueza María Florencia Caruso Martín afirmó que quedaron probados los hechos que describió la fiscalía y la querella y que los 4 imputados fueron responsables y coautores de su secuestro y asesinato. En la sentencia se mencionó la figura de femicidio y se aclaró que, aunque no estaba incluida en el Código Penal al momento del cometerse el delito, es fundamental enmarcar lo ocurrido en un contexto de violencia de género.

Hay abrazos, lágrimas, puños en alto, suspiros, rostros atravesados por el dolor que sienten algo de alivio, hay un grito que se escuchó más fuerte que otros días: “Otoño presente”. Las banderas cubrieron otra vez la esquina de Villegas y Urquiza, en Cipolletti, donde este miércoles 5 de febrero de 2025, se leyó la sentencia del juicio que comenzó el 26 de noviembre del año pasado, que tuvo 12 audiencias con declaraciones testimoniales de familiares, amigas, amigos, compañeras de escuela, peritos, forenses, ex policías y funcionarios. El establecimiento de la pena se hará en una audiencia de cesura.

Foto: Silvina Ojeda.

Por unanimidad, el Tribunal integrado por María Florencia Caruso Martín (Presidenta), Juan Pedro Puntel y Amorina Liliana Sánchez Merlo, declaró culpables a los cuatro imputados en calidad de coautores (Cau, Jafri, Lagos y Antilaf) del delito de privación ilegítima de libertad agravada en tres circunstancias: por ser más de tres personas, por ser la víctima menor de edad, y por la haber ocasionado intencionalmente su muerte.

La jueza Caruso Martín, encargada de la lectura, explicó que dio por probados los hechos presentados por la fiscal Teresa Giuffrida y por la abogada querellante, Gabriela Prokopiw, a partir de los testimonios y las pruebas presentadas. Describió que el 23 de octubre Otoño salió de su casa con sus hermanos en la bicicleta roja de su papá, que al llegar al centro del pueblo la dejó en la casa de una de sus amigas (donde habitualmente lo hacía) que luego se encontró con otra amiga y fueron juntas a la escuela. Estuvieron en clases y luego, con otra compañera, compartieron el almuerzo y fueron a las clases de vóley en el polideportivo. Con otras dos amigas emprendieron el regreso ya pasadas las 21 horas, en ese tramo se cruzaron a un amigo y también a Lagos.

Foto: Silvina Ojeda

Ya sola, dos testigos dijeron ver caminando a Otoño cerca de las 23 de regreso a su casa. El tramo donde desapareció son unos 1.000 o 1.200 metros de camino con poca iluminación en esa época y en una zona de chacras. “La única intención de Otoño era regresar a su casa”, afirmó la jueza. Agregó que también quedó probada que la muerte de Otoño fue violenta en base a la prueba científica, que fue previa a que la arrojen al canal de riego, que estuvo entre 3 y 6 meses sumergida, que la arrojaron con un peso contundente, y que por el lugar (el desarenador de la Usina de El 30 cuenta con turbinas que destrozan todo lo que pasa por allí), es evidente que querían deshacerse del cuerpo.

Caruso Martín indicó que todos los indicios que se presentaron en el juicio analizados de manera concordante permiten sin dudas declarar a los 4 acusados como responsables de lo ocurrido. También aclaró que la coautoría. “No existe duda que han sido responsables, todos tuvieron conocimiento. La coautoría no significa que todos hicieran lo mismo, pero sí que actuaron de manera conjunta y que hubo una división de tareas”, sostuvo. Además, indicó que ninguno presentó una coartada para el día de la desaparición de Otoño, y que se valoraron las pruebas genéticas, los rastrillajes que dieron con la casa de los hermanos Cau y Jafri durante los primeros días de la investigación, y las pericias odorológicas. Afirmó que en el nylon hallado había olor de los cuatro y de Otoño. “Esto es un indicio contundente de que los cuatro participaron en arrojar el cuerpo al canal, en la privación ilegítima y la muerte”, afirmó la jueza. También aseveró que los cuatro conocían a Otoño, sabían sus movimientos y horarios ya que Cau y Jafri vivían cerca y además, su hermana era amiga de Otoño. “Cau, Jafri y Antilaf se juntaban a tomar cerveza. Lagos conocía a los hermanos del ambiente delictivo, se juntaban en el puente. Se pusieron de acuerdo, idearon un plan para privar a Otoño de su libertad, no fue al azar”, remarcó la jueza.

Otro de los indicios que valoró el Tribunal fueron comentarios realizados con posterioridad a la desaparición de Otoño y que varios testigos relataron durante el juicio. “Se nos fue de las manos” es una frase que se escuchó en distintos testigos posteriormente a la desaparición. Es llamativo que lo contaran personas distintas no concatenadas entre sí. Es un indicio más de culpabilidad”, destacó Caruso Martín.

Al finalizar la jueza también remarcó el comportamiento de los acusados durante el debate: llegadas tardes, orden de captura para Lagos por no presentarse, varios se durmieron en plena audiencia, actitud desafiante, y hasta asistir alcoholizados.  Estas actitudes las mantuvieron hasta la última jornada. Cau llegó con un evidente estado de ebriedad, y a los gritos aseguró “acá vamos a ganar, si no ganamos es todo trucho”, a lo que Antilaf le respondió “es todo política esto”.

Foto: Silvina Ojeda

 

En la sentencia se hizo mención a la figura de femicidio, aún cuando no estaba tipificada en el Código Penal al momento de los hechos: “por ser mujer y una menor de edad merece un doble plus protectorio, debe analizarse con amplitud probatoria indiciaria donde quizás la prueba científica no fue la base pero sí la testimonial, pericial y odorológica, las cuales deben ser analizadas en conjunto no aisladamente. Mas allá de no aplicarse la figura de femicidio los derechos consagrados a las mujeres surgen en la reforma constitucional del año 1994 incorporándose a nuestro ordenamiento jurídico tratados internacionales, Argentina se comprometió internacionalmente a adoptar medidas para prevenir sancionar y erradicar la violencia de genero sancionando a los responsables”.

Foto: Silvina Ojeda (archivo)

La abogada de la familia fue quien habló luego de la sentencia ya que Roberto Uriarte, el papá de Otoño, no pudo asistir. Vive en El Bolsón y los incendios que azotan la región no le permitieron viajar. “Para Otoño lo único que podemos esperar es la verdad. Roberto pidió que recordáramos eso, que para ella no hay justicia. Esta sentencia no nos devuelve a Otoño pero nos deja un mundo más justo para nuestros hijos”, afirmó Prokopiw.

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