El Gobierno nacional y sus aliados argumentan que el ajuste a las universidades nacionales responde a la falta de auditorías y las universidades han salido a mostrar sus mecanismos de control, tanto internos como externos. En este debate, nos preguntamos sobre los resultados que tiene para mostrar Aníbal Tortoriello, uno de los actores del Congreso nacional que, en representación de la provincia de Río Negro, dio su voto para ratificar el veto a la Ley de Financiamiento Universitario, votada apenas unas semanas atrás.
Aníbal Tortoriello, con el antecedente de haber sido intendente en la ciudad de Cipolletti (2015-2019), ganó una banca como diputado nacional que asumió en diciembre de 2021 y luego fue candidato a gobernador en 2023, por el partido PRO, con resultados muy competitivos. Antes de su vida política trabajó en la empresa de su familia, dedicada al transporte y distribución de gas licuado de petróleo con una base en Cipolletti y de alcance en toda la Patagonia.
A casi tres años de su asunción como legislador nacional, en la página oficial del Congreso de la Nación se observa que el diputado ha trabajado en dos reformas de ley:
1) Reforma a la Ley 26485, que tipifica los tipos de violencias por razones de género, los ámbitos donde esto sucede y las responsabilidades estatales para reducirla, erradicarla y prevenirla. El diputado Tortoriello propone que se omita los párrafos donde el Estado garantiza el Patrocinio Jurídico Gratuito y la Asistencia Jurídica Gratuita.
2) Reforma a la Ley 24449, para modificar las edades mínimas para el acceso al carnet de conducir profesiona, y que desde los 18 años se pueda contar con el permiso profesional, que claramente se vincula a la actividad privada familiar de transporte de gas licuado de petróleo.
Cuantitativamente, el diputado Tortoriello en 34 meses de trabajo como legislador nacional por la provincia de Río Negro ha presentado dos proyectos de modificación de ley, es decir, un proyecto presentado cada 17 meses. Una de las reformas fue presentada en dos ocasiones (2022 y 2024).
Cualitativamente, los temas que preocupan y que son la agenda del legislador rionegrino se reducen a eliminar derechos a personas que sufren violencia por razones de género y mejorar las condiciones de las empresas de transporte, con conductores cada vez más jóvenes, aunque implique cada vez mayores desafíos a la seguridad vial.
Entre las tareas legislativas también se realizan pedidos de informes al Ejecutivo nacional, y nuevamente vemos que el diputado tiene en agenda cuestiones que se vinculan directamente la actividad privada. Tortoriello, en casi tres años, presentó diez pedidos de informes, de los cuales más de la mitad están vinculados a la actividad económica del legislador: obras del gasoducto cordillerano patagónico para transporte de gas licuado, estado y pavimentación de las rutas, certificación técnica de vehículos, y condiciones técnicas de vehículos.
El Gobierno nacional celebra sus hazañas empujando a estudiantes y docentes de todo el país a expresarse en defensa de las instituciones universitarias, mientras Tortoriello promete llegar a la gobernación en 2027 con una motosierra que dice tener preparada para Río Negro, en un claro acercamiento al fuego de La Libertad Avanza.
Estudiantes de las universidades públicas le reclaman en la vereda de su casa, las autoridades de Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (FaDECS) de la UNCo lo declaran persona no grata y la sociedad mira con más preocupación las prácticas desmedidas de un ajuste que no termina. El final es abierto.