Neuquinizate, el heterogéneo espacio que conduce Rolando Figueroa con el cual enfrentó al MPN y le ganó por primera vez en la historia las elecciones a gobernador, tiene en sus filas a dirigentes peronistas. La mayoría se integró al armado durante la campaña, luego que el candidato decidiera no ir a una interna dentro del MPN y formar un espacio propio, abriendo las puertas al más amplio abanico de fuerzas políticas vivas en Neuquén. Mientras que una referente, que hoy exhibe las mayores tensiones que esta situación presenta, se incorporó una vez que la ciudadanía neuquina ya se había expresado en las urnas.
Todos flotan en un mar de contradicciones al formar parte de un gobierno provincial que apoya gran parte de la política que propone el Gobierno nacional, como por ejemplo la Ley Bases -que contiene, entre muchos otros puntos, el RIGI- pese a que los dirigentes del peronismo a nivel nacional se erigieron como los principales detractores de esa ley así como al pacto fiscal.
Los principales referentes neuquinos que hoy forman parte de Comunidad eran integrantes del Frente de Todos y llegaron a ser funcionarios por ese espacio político u ocuparon importantes lugares en sus listas.
Ana Servidio fue concejala de Neuquén por el Frente de Todos entre 2019 y 2023, y se desempeña desde el 10 de diciembre pasado como titular del Copade (Consejo de Planificación y Acción para el Desarrollo de la Provincia del Neuquén), organismo en el que ya se había desempeñado como Directora Provincial de Ordenamiento Territorial durante la gestión del emepenista Pablo Gutiérrez Colantuono, hasta asumir su banca como concejala.
Afiliada al PJ, Servidio había ido en la lista a diputados provinciales por Comunidad, pero quedó afuera de la Legislatura por escasos votos. Es una de las dirigentas que, al momento de alejarse del espacio del FdT en Neuquén, esgrimió que no se sentía representada ni escuchada por el partido, donde las decisiones las toman los mismos dirigentes de siempre, en referencia a Oscar Parrilli, Darío Martínez y Ramón Rioseco, sin abrir el espacio a nuevas voces.
El otro concejal peronista que tuvo hasta 2023 la ciudad de Neuquén, Marcelo Zúñiga, también se sumó al armado provincial cuando todavía no estaba definida la elección y después del 10 de diciembre asumió como subsecretario de Producción, dependiente de la Secretaría de Producción e Industria del Ministerio de Economía, Producción e Industria, a cargo del dirigente radical Juan Peláez.
Referente del Movimiento Evita, Zúñiga comenzó a militar en Comunidad a principios del año pasado siendo titular del Consejo local del PJ en la ciudad de Neuquén. En declaraciones periodísticas, aseguró entonces que el peronismo neuquino estaba con Figueroa y emanó duras críticas a la postulación de Rioseco como candidato a gobernador por el espacio. Su nombre figuró en una de las listas encabezadas por Rolando Figueroa y Gloria Ruiz para aspirar a una banca en la Legislatura, pero no entró y recaló finalmente en el Ejecutivo.
En la misma colectora estaba Soledad Martínez, encabezando la lista. La dirigenta del Frente Grande fue intendenta de Zapala y luego diputada provincial (2019-2023) por el Frente de Todos. El día que presentaron la lista, en la localidad de la que es oriunda, Martínez sostuvo que “representa al peronismo y a los sectores que nos han acompañado siempre” y argumentó que muchos compañeros “reclamaban este espacio de confluencia”.
El 10 de diciembre, la zapalina asumió como ministra de Educación y en ese rol se enfrenta de manera cotidiana a exigencias de sus ex compañeros de espacio político, que detentan el rol de diputados provinciales, como Darío Peralta o Darío Martínez. La semana pasada, el presidente del bloque de Unión por la Patria en la Legislatura la interpeló, mediante la presentación de un pedido de informe sobre el proyecto de presentismo en la docencia, muy cuestionado por el sindicato de docentes Aten, que finalmente se convirtió en ley casi sin discusión de parte de los legisladores y sin la presencia de la ministra para explicar los alcances de la medida.
De hecho, el Plenario de secretarios y secretarias generales de Aten votó un paro por 48 horas para el 22 y 23 de julio y exige la renuncia de la ministra.
Lorena Barabini fue, durante el gobierno de Alberto Fernández, la delegada en Neuquén del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y ahora está a cargo de la subsecretaría de la Mujer, dependiente de la Secretaría de Género del Ministerio de Desarrollo Humano, Gobiernos Locales y Mujeres del gobierno provincial. Como contó Intempestiva en esta nota, las políticas de género están siendo vaciadas de contenido por el actual gobierno provincial. Puntualmente, en el área de Diversidad, se suspendió la entrega de módulos alimentarios, de subsidios sociales transitorios y se dieron de baja las becas de estudios para personas trans.
En 2021, Barbini había librado una disputa hacia adentro de su partido para que una mujer con militancia territorial encabece la lista del peronismo neuquino y, naturalmente, exponía su voluntad de ser candidata. Los acuerdos de cúpula dejaron fuera de esa posibilidad a Barabini. Las dos listas que compitieron en las PASO fueron finalmente encabezadas por mujeres, pero por otras mujeres: Asunción Miras Trabalón por el parrilismo y Tanya Bertoldi por el espacio de Darío Martínez.
Esta última asumió finalmente la banca por el espacio de Unión por la Patria y fue también la última dirigenta peronista en hacer público su acompañamiento a Rolando Figueroa en la provincia. Lo hizo en junio de 2023, cuando las elecciones ya habían definido la histórica derrota al MPN a nivel provincial, durante el acto de lanzamiento de Rubén “Ojito” García como candidato a intendente de Cutral Co, nada menos que en la tierra del candidato a gobernador del peronismo.
En marzo de este año, Bertoldi fue designada como presidenta de la Unidad Provincial de Enlace y Ejecución de Proyectos con Financiamiento Externo (Upefe), que depende del Ministerio de Jefatura de Gabinete, cargo que, según indicaron de manera oficial, detenta ad honorem porque continúa ocupando su banca en Diputados. Es, tal vez, la dirigenta que mejor expone las contradicciones que la atraviesan, en tanto desde su banca en el Congreso representa los lineamientos de su espacio de pertenencia a nivel nacional al tiempo que en la provincia forma parte de un gobierno que se opone a ellos.
Muestra de ello es su voto negativo a la Ley Bases, incluido el capítulo del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), cuya sanción Figueroa esperaba con ansias.
